Errores comunes en la decoración.

Es normal que se cometan algunos errores a la hora de decorar el hogar, y más cuando se está haciendo cambios en el espacio o se incorporan nuevos muebles, accesorios o colores a las paredes, por eso hay que asesorarse un poco al momento de hacer cambios.Aquí les dejo los errores más comunes:

1. Flores artificiales. Son de muy mal gusto, deshazte de ellas. Si te gustan las flores, acomoda ramos naturales en puntos estratégicos, o bien agrega plantas vivas en la decoración.
2. Fotos y Diplomas:Una de las razones que provocan estos errores involuntarios es fundamentalmente de carácter sentimental. Qué difícil se hace retirar los retratos de nuestra familia, aún cuando tengamos una por cada año cumplido, o aquella foto que nos recuerda a nuestra mascota favorita al momento de reorganizar una decoración. Y si a eso le añadimos que estos cuadros vienen enmarcados en porta-retratos de materiales y formas diversas, el resultado final no será precisamente el mejor. Lo recomendable es escoger la mejor fotografía y colocarla en armonía con su decoración.
    Es muy comprensible que los padres se sientan orgullosos de los diplomas de la escuela o los títulos universitarios alcanzados por sus hijos, pero hacer de cada uno de ellos un cuadro y ubicarlos en las paredes de la sala no colabora necesariamente con el embellecimiento de la habitación. Una alternativa es intercambiarlos cada cierto tiempo, escogiendo los que guarden mayor relación con el conjunto y adecuar un espacio dedicado exclusivamente a ellos.

   

   La  colocación de los cuadros es muy importante, hay unidad tanto en los marcos como en los paspartú.  La mesa  puede que tenga exceso de elementos, pero l conjunto se ve bien..

   
   

   

   Unas cuantas fotos son suficientes, estas son artísticas en blanco y negro, como se aprecia hay unidad en cuanto a los marcos, y están colocadas de manera apropiada;  no cuelgues cuadros y fotos en fila, recuerda que no tienes una galería en casa.
   
   



Es lo adecuado en cantidad de elementos sobre una mesa de centro, no sobrecargues; es importante  tener un espacio funcional.

3.  Adornos en la mesa de centro. Hay una cultura muy fuerte en torno a evitar el vacío en el espacio, en arquitectura se llama  el "horror vacui" o miedo al vacío, esa sensación de tener que llenar el espacio vacío con una mesa de centro llena de objetos, probablemente vendría de cierto miedo a la escasez. Recuerda que la mesa de centro tiene una función social, y es el de poder utilizarla para poner el café cuando tenemos algún invitado en casa, o para una revista que estemos leyendo, pero si está sobrecargada convertiremos la sala en el típico espacio de "veme y no me toques". Lo adecuado es que los espacios además de verse bien sean funcionales. 
4. Demasiados cojines. Los sillones son para sentarse. Si los cojines lo impiden, hay que desechar unos cuantos.
5. Exceso de arte. Error común en los coleccionistas. Demasiados objetos de arte dificultan incluso la limpieza y la libre mobilidad. Vale más buscar un equilibrio.
6. Ventanas sin cortinas ni persianas. Además de que no podrás regular la luz, lucirán tristes y abandonadas. Aunque tengas persianas en las ventanas, siempre es adecuado usar paneles de cortinas en los costados para embellecer el ambiente y suavizar la apariencia de las paredes. Es una oportunidad perfecta de añadir color y textura a través de la tela.  Para que quede más profesional, deja que los paneles de cortinas toquen el piso.
7. Mala distribución del espacio. Recuerda que una buena decoración siempre tiende a la funcionalidad. Si no puedes caminar entre los muebles, hay que redistribuirlos.
8. Iluminación insuficiente. Si bien hay espacios en que la luz tenue es lo indicado, cuida que no sea tan tenue como para impedir la visibilidad. También mantén las paredes neutrales en colores claros, así puedes incorporar el detalle de color en los accesorios, como por ejemplo: en los cojines decorativos, en la alfombra, y en el arte de las paredes y además agregas más luz al lugar.
9. Cables por todos lados. Además de que deslucen el entorno, puedes tropezarte con ellos. Busca la manera de ocultarlos.
10. Pasillos ignorados. Date la oportunidad de decorar los pasillos. Usa cuadros, elige colores especiales para sus paredes.
11. Recuerdos o souvenir. Seguramente tienen valor sentimental, pero a menos que mantengan el estilo de tu decoración, guárdalos en un baúl, agrega un mueble con vitrina que puedas decorar  o deséchalos.



Esta vitrina tiene un estilo clásico, pero las hay de distintos estilos y tamaños;  es apropiada para los recuerdos, esos objetos de valor sentimental que nos gustan y no queremos que se dañen ni que interfieran con la decoración.

12. Alfombras movedizas. Si no están fijas, es recomendable que las sujetes con grapas especiales o que uses el peso de los mismos muebles para evitar que se muevan.
13. Peluches en la habitación. Este es otro error común que no quise pasar por alto, es desagradable el exceso de peluches, más si están colgados del techo o de la pared; hay también quienes tienen mesas completas llenas de peluches, y como están consientes de que son perjudiciales para la salud por el polvo y los ácaros entonces los tienen "plastificados", se ven mal y no cumple el objetivo del peluche, que es el de tener una figura agradable a quien abrazar, el tacto con la textura del objeto; lo ideal es no tener tantos peluches, dejar un par en la habitación, en una repisa o un mueble y el resto guardarlos como recuerdo en un baúl, o bien deshacerse de  ellos.